La blefaroplastia es un procedimiento quirúrgico destinado a corregir el exceso de piel y músculo de los párpados superiores e inferiores. Se retira selectivamente o bien se reposiciona el tejido adiposo subyacente, que produce bolsas en los párpados. La blefaroplastia puede mejorar la expresión de los ojos, la piel caída y las bolsas en la zona de los párpados. También puede ayudar a mejorar la visión en pacientes mayores que sufren de párpados superiores caídos. Aunque puede añadir un pliegue al párpado superior de una persona de origen asiático, no podrá borrar toda evidencia de su origen racial. La blefaroplastia no elimina las patas de gallo ni otras arrugas, no elimina la tonalidad oscura bajo los ojos ni levanta las cejas.
La cirugía se personaliza para cada paciente, en función de sus necesidades particulares. Se puede realizar en la zona de los párpados superiores o inferiores (o en ambas), o bien en conjunto con otros procedimientos quirúrgicos en la zona de los ojos, la cara, las cejas o la nariz. En algunos pacientes que padecen de tono flojo entre el párpado inferior y el globo ocular, es posible que se recomiende considerar el procedimiento de estiramiento del párpado inferior (cantoplastia/cantopexia) en el momento de la blefaroplastia. La cirugía de párpados no detiene el proceso de envejecimiento. No obstante, sí puede atenuar la apariencia de flojedad y bolsas en la zona de los párpados.